Estimado Matías.
Hoy es un día muy caliente en Monterrey. El sol a plomo, calor de 34 grados, un bochorno sofocante ocasionado por la lluvia de las 4.00am y el viento caliente como si saliera de una secadora. El trabajo no para y no he podido concentrarme en todo el día. Me he acordado de Diego, Blanca y de ti sin parar. Hoy llegó a Monterrey proveniente de Victoria Blanca Adelina, no Blanca, Blanca Adelina, llego feliz, con una sonrisa y una mirada radiantes, como no le había visto en años. Derramo una lágrima en el camino, es un manojo de emociones. Me habla constantemente de ti. Nosotros acá y tú allá. Más de 3000 kilómetros de distancia, montañas, cielos y tiempo nos separan y nos unen. Mandaremos Pilar, Rocío y yo el mejor regalo que te pudimos conseguir en Mexico. El cálido y amoroso abrazo de una abuela que se encuentra en la travesía para estrecharte en sus brazos. Mañana parte rumbo a Bogota, ten paciencia. Bienvenido a tu aventura. Estoy Feliz.
Vicente TH. 12. Mayo. 2009